domingo, 26 de abril de 2009

A orillas del río. Colonia, Uruguay.

Sonidos perturbantes no dejan concentrarme. Una extraña ave grita desde mi ventana, yo la miro con desconcierto... Por los valdíos suenan grillos, sus luces iluminan los pastos duros que un día corte con mi mano... El hombre de sombrero de paja colgado de la soga revolotea por estos aires, vientos cargados de humedad; y unos cuantos cuervos hambrientos atacan su cuerpo. Ecos del silencio manchan la noche de sangre opaca. La figura de un gato se trasluce en la luna, y la soledad que se hace añeja... Saludan las hormigas, que con restos de piel, construyen una galaxia infinita. Los grillos vuelven a brillar y esa extraña ave mira otra vez por mi ventana. Mi brazo se extiende para alcanzarla, y en su vuelo se llevaba... "una extraña historia sin final"...

(2005)

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